This is a summary of the legal
framework of the integration of ICT in ESO:
La utilización de las Tecnologías
de la Información y la Comunicación (TIC) en la enseñanza es un instrumento de
gran valía tanto para alumnos como para profesores. Es por ello que el artículo
11 del Real Decreto 1105/2014, de 26 de diciembre, resalta como uno de los
objetivos principales de la Educación Secundaria Obligatoria la importancia de
la utilización de las TIC: “Desarrollar destrezas básicas en la utilización de
las fuentes de información para, con sentido crítico, adquirir nuevos
conocimientos. Adquirir una preparación básica en el campo de las tecnologías,
especialmente las de la información y la comunicación”.
Resulta necesario enseñar a los
alumnos de ESO a utilizar, con solvencia y responsabilidad, las tecnologías de
la información y la comunicación, puesto que “el uso de las Tecnologías de la
Información y de la Comunicación como herramienta para obtener datos, elaborar
la información, analizar resultados y exponer conclusiones se hace casi imprescindible
en la actualidad”. Además, “la posibilidad de acceder a una gran cantidad de
información implica la necesidad de clasificarla según criterios de relevancia,
lo que permite desarrollar el espíritu crítico de los alumnos”.
“Los alumnos de ESO (...) son nativos
digitales y, en consecuencia, están familiarizados con la presentación y transferencia
digital de información”, por ello es necesario integrar las TIC en cada una de
las asignaturas presentes en las etapas de ESO y Bachiller. Con este motivo se
establece en el documento el posible uso que se puede hacer de las TIC en cada
materia.
Dada la importancia y el enorme
beneficio de las TIC en la enseñanza, se ha creado una asignatura llamada Tecnologías
de la Información y la Comunicación, que se imparte con diferente nivel en 4º
ESO y 1º y 2º de Bachiller. Tal vez esta asignatura sea una de las más útiles
dada la evolución tecnológica de la sociedad actual, puesto que, como se puede
extraer de la contextualización de esta asignatura, “en la actualidad vivimos
una revolución permanente fácilmente observable: manejamos información y
aparatos tecnológicos que hace unos pocos años no éramos capaces de imaginar.
La forma en la que vivimos y trabajamos ha cambiado profundamente y han surgido
un conjunto de nuevas capacidades y habilidades necesarias para desarrollarse e
integrarse en la vida adulta, en una sociedad hiperconectada y en un constante
y creciente cambio. Los alumnos y alumnas deben estar preparados para adaptarse
a un nuevo mapa de sociedad en transformación”.
Es por ello que “desarrollar la
competencia digital en el sistema educativo requiere una correcta integración
del uso de las TIC en las aulas y que los docentes tengan la formación
necesaria en esa competencia. Es probablemente este último factor el más
importante para el desarrollo de una cultura digital en el aula y la sintonía
del sistema educativo con la nueva “sociedad red”. En este sentido, la Unión Europea
lleva varios años trabajando en el DIGCOMP: Marco para el desarrollo y
comprensión de la competencia digital en Europa”.
Las TIC están en continua
evolución, motivo por el cual esta materia pretende dotar al alumnado “de los
conocimientos, destrezas y aptitudes para facilitar un aprendizaje permanente a
lo largo de la vida, de forma que el alumnado pueda adaptarse con versatilidad
a las demandas que surjan en el campo de las TIC”. Además, “es imprescindible
educar en el uso de herramientas que faciliten la interacción de los jóvenes
con su entorno, así como en los límites éticos y legales que implica su uso.
Por otro lado, el alumnado ha de ser capaz de integrar y vincular estos
aprendizajes con otros del resto de materias, dando coherencia y potenciando el
dominio de los mismos”.